Father and son (by El Genio escocés)

Joder -perdón por la expresión- pero cada día me gusta mas Rod Stewart y no te digo nada cantando a Cat Stevens. Hoy tengo un día flojo y casi he llorado con esta canción, que ya exise en este blog en una entrada antigüa que dedique a Pablo Jr. Espero que la disfruteís.

Padre:
No es tiempo de hacer un cambio,
Relájate, tranquilízate.
Todavía eres joven, ese es tu defecto,
Hay tanto q tienes q saber.
Encuentra una chica, sienta cabeza
Si quieres puedes casarte
Mírame, soy viejo, pero soy feliz.

Una vez yo fui como eres ahora, y se que no es fácil
Estar tranquilo cuando has encontrado algo que esta pasando.
Pero tomate tu tiempo, piensa mucho,
Piensa en todo lo que has obtenido
Por ti estarás aquí mañana, pero tus sueños probablemente no.

Hijo:
¿Como puedo tratar de explicar, cuando hago y el rechaza de nuevo?
Siempre ha sido lo mismo, la misma vieja historia.
Desde el momento que pude hablar estaba obligado a escuchar.
Ahora hay un camino y se que tengo q irme. Se que tengo que irme.

Padre:
No es tiempo de hacer un cambio,
Relájate, tranquilízate.
Todavía eres joven, ese es tu defecto,
Hay tanto q tienes q saber.
Encuentra una chica, sienta cabeza
Si quieres puedes casarte
Mírame, soy viejo, pero soy feliz.

Hijo:
Todo el tiempo que llore, guardando para mi todo lo que se,
Es difícil, pero más difícil ignorarlo
Si ellos tenían razón, estoy de acuerdo, pero ellos no me conocen.
Ahora hay un camino y se que tengo q irme. Se que tengo que irme
Se que tengo que irme.

Microrrelato (III)

Se conocieron en un chat. Él le había enviado un mensaje privado en el que decía: ¿quieres que asemos un dinosario juntos?. A ella le debíó hacer gracia el mensaje ya que no tardó ni un segundo en contestar. Hablaron durante horas esa noche y quedaron para conocerse dos días mas tarde. A partir de ese momento, todo se desarrolló muy rápido. No tardaron en concertar la boda para finales de año. Se casaron en una pequeña capilla y recién acabaron el banquete nupcial, partieron hacia la paradisíaca isla que él había escogido como regalo de bodas. Pero a los tres días de su llegada, surgió la tragedia. Ella había conocido a otro hombre y le dijo que se separaría en cuanto regresaran de la luna de miel, para comenzar una nueva vida con su recién estrenado amor. Jamás se perdonaría haberla llevado a aquel "cinco estrellas gran lujo" con conexión wifi a internet.

Me gustas ........

Creí que después de tantos días, ya varios meses de hecho, me habría olvidado de ti. Pero no; hoy me doy cuenta de que sigues demasiado presente en mi cabeza. Me sigues ensimismando como antes, a pesar de mis esfuerzos por ignorarte. "Qu'est-ce que je vais faire? Je ne sais pas. Qu'est-ce que je vais faire? Je me suis perdu".
Me gustas colombiana, me gustas boliviana, me gustas peruana, me gustas dominicana, me gustas panameña, me gustas venezolana, me gustas brasileña, me gustas tuuuuuuuuu............

Microrrelato (II)

Por fin he decidio dejar las armas e intentar llevar una vida tranquila. Me he ido a un pequeño pueblecito al sur y voy a intentar vivir criando algo de ganado. Estoy hastiado, a pesar de mi corta edad, de huir constantemente. Eso de ser el mas famoso de la zona, me ha hecho mucho daño, aunque la mitad de las cosas que cuentan sobre mi no sean mas que invenciones. Ya se sabe, cría fama y echate a dormir. Hablando de dormir, creo que entraré en mi casita y me pondré a ello. !BANG¡, he oído el disparo pero no he sentido nada, solo que estoy caído en el suelo, rodeadoo de un gran charco de sangre. Ahora si, empiezo a notar un frío helador, comienzo a tener miedo. Oigo a alguién acercarse en la oscuridad. Le veo el rostro difuminado por la lumbre. Oh Dios mío no!, ¿porqué precisamente mi antiguo amigo y compañero? No puedo pensar, me está invadiendo el sueño; sueño y frío. Frío que me entumece y acobarda, no p u e d o s e g u r

Insomnio (microrrelato)

Por enésima vez en los últimos meses, allí se encontraba otra vez. Frente al ordenador, jugando a una guerra de piratas on-line que ya no soportaba y leyendo correos que le habían sido enviados hacía meses. Oía a su mujer y su hijo emitir esa especie de ronrroneo de los que duermen plácidamente. Quizás fuera, pensaba, porque sus almas estaban tranquilas. Ya se había acostumbrado a que este sonido y el de la radio encendida fueran su banda sonora nocturna. Llevaba tiempo en esta situación y no sabía a que era debido. Quizás a su no ya tan reciente pérdida de empleo. Quizás por la vuelta a su estado mental alterado. Quizás............. quizás, quizás. Su cabeza ya no daba para mucho mas, iba llegando la hora de apagar el PC y su cabeza, lástima que esta última no se pudiera reiniciar como el ordenador cuando se le colgaba, pensó melancólicamente.